Por: Dra. Maritza Hernández
La presbiacusia o pérdida auditiva relacionada con la edad es la causa más común de hipoacusia en el adulto mayor de 65 años, con una prevalencia aproximada del 40%.
Esta pérdida auditiva repercute notablemente en la calidad de vida de esta población, debido a que se disminuye notablemente la capacidad de comunicación conllevando a pérdida de autonomía, cambios en la personalidad y aislamiento social; razones por las que su diagnóstico y tratamiento son de vital importancia.
Muchos factores contribuyen a este tipo de pérdida auditiva, entre ellos, factores genéticos, ambientales y enfermedades concomitantes. La forma más común de presbiacusia es la producida por alteraciones del oído interno, y de las vías nerviosas que conducen la información del sonido al cerebro. Esta generalmente comienza afectando los tonos altos (voces de niños y mujeres).
Las medidas terapéuticas están encaminadas a mejorar la comunicación gracias al avance de dispositivos electrónicos (audífonos) que han contribuido notablemente a paliar los efectos de la pérdida auditiva.
Por otra parte, el mantenimiento de una buena salud que disminuya el riesgo de enfermedades cardiovasculares puede reducir la afectación de la audición.