Dr. Marcos Poler
Cirugía Cardiovascular
Las varices son definitivamente una enfermedad, que desde sus grados iniciales se convierte en un problema estético.
La enfermedad varicosa es la dilatación de las paredes de las venas superficiales, esto produce una insuficiencia del sistema de las válvulas de las venas. Como consecuencia del deterioro de las válvulas, se produce un aumento de la presión venosa y por ende hay cambios de la piel desde las feas arañitas, aumento de la pigmentación, eccemas, hasta las úlceras venosas crónicas.
La clasificación de las varices van del grado 1 hasta el grado 6, es decir, desde un comienzo con síntomas de cansancio de los miembros inferiores, pasando por la presencia de arañitas y telangiectasias hasta llegar a la formación de la úlcera varicosa.
La aparición de varices es muy frecuente, ya que entre un 20 y 30 % de las mujeres presentan este defecto venoso. Los hombres no quedan exentos de padecer esta afección, pues por cada 4 mujeres se presenta en un sólo hombre. Esta dolencia es muy común en la raza caucásica y tiende afectar más personas entre los 30 y 65 años.
Causas
La causa más frecuente de las varices es la genética familiar; seguida después por el sedentarismo, el cual enlentece la sangre; el embarazo o el sobrepeso también son unas causas importantes, porque ambos sobrecargan el sistema venoso, imponiéndole una carga extra a los miembros inferiores y un aumento de la presión abdomino-pélvica. También las personas que se encuentran tomando terapia hormonal como los estrógenos, incrementan la frecuencia de las varices.
Diagnóstico
Es muy importante la evaluación del paciente varicoso para determinar el grado de la enfermedad, darle un tratamiento y un pronóstico adecuado. La evaluación debe comenzar con el uso de un doppler o ultrasonido de ambos miembros inferiores, donde se puede observar la incompetencia de la vena safena magna o de sus venas perforantes, y del sistema venoso profundo. También se puede determinar la circulación arterial de los miembros y descartar si hay un problema de linfedema en las piernas del paciente o una isquemia (falta de sangre del miembro).
Tratamiento
Las arañitas y telangiectasias son más que todo un problema estético, se pueden inyectar con agentes irritantes como el etoxiesclerol o el lapirio y uno escoge la solución que se va a inyectar, ésta va desde el 0.5 % en las venas reticulares, y en los casos más severos cuando las válvulas están más dañadas se utilizan soluciones al 1 %, para inyectar la vena principal llamada safena magna.
Hoy en día existen otras técnicas ambulatorias para estos casos severos, inyecciones intravenosas como la varithena (foam de polidocanol), el venaseal, que es una solución tumescente libre y, el clarivein, que es un tratamiento dentro de la vena (endovascular) para provocar el cierre absoluto de la vena.
En los casos de varices que requieren la cirugía tenemos los sistemas clásicos de cierre de la safena magna con tratamientos endovasculares del láser y de la radiofrecuencia en que se logra la ablación (cierre) del sistema venoso y aún de las perforantes, que son tan importantes en la causante de la úlcera varicosa.
Siempre las mujeres preguntan si existe una recurrencia de las varices y la respuesta es sí, por sobre todo en los pacientes que permiten un sobrepeso importante y una falta ejercicios en su vida diaria.
Prevención
Lo más importante para evitar una recaída es llevar una vida sana que se acompañe de una dieta balanceada, con actividad física diaria. De esta forma, se evita la formación de estas venas superficiales que se convierten en una molestia estética.
Siempre recomiendo el uso de medias de soporte venoso, que al producir una compresión de la pierna le exige al sistema venoso trabajar de forma adecuada, lo que reduce los síntomas de la enfermedad.